Desde Nowtrality apostamos por la aceleración de la descarbonizar la economía hacia un modelo de sociedad más concienciado, sostenible e involucrado con el medio ambiente. Por ello, a pesar de que nosotros también contamos con proyectos que apoyan la reforestación local favoreciendo la biodiversidad, también queremos dar visibilidad a otros iniciativas. Una de ellas es la plataforma de compensación de carbono de la ONU.
La ONU y la descarbonizar de la economía
En 2015, Naciones Unidas lanzó una página web centrada en la búsqueda de la participación ciudadana para la lucha contra el cambio climático. De este modo, cada persona podía reducir su huella de carbono colaborando con distintas iniciativas que buscaran mitigarla a nivel global. Todo esto está enmarcado en los Objetivos de Desarrollo Sostenible, promovidos por la propia institución.
Los resultados no pueden ser más favorables. De acuerdo con la propia organización, en sus primeros cinco años se alcanzaron las 2 millones de RCE. Estas siglas corresponden con Reducciones Certificadas de Emisiones, y son acciones de desarrollo sostenible y fomento de las energías limpias.
Hasta hace algunos años, solo las naciones podían participar en esta acción. Sin embargo, posteriormente se universalizó para alcanzar a toda la humanidad. De acuerdo con la organización, la clave está en reducir las emisiones al máximo posible para luego compensar lo que no se puede eliminar.
Registro de compensación de la huella de carbono
El registro de compensación es un grupo cada vez más grande de personas dispuestas a alcanzar la huella neutral. De esta forma, la ONU dispone de una plataforma en la que puedes registrarte y formar parte, igual que puedes formarte parte de la comunidad Nowtrality y empezar a apoyar proyectos que compensan la huella ecológica y favorecen la descarbonización de la economía.
Reducir, compensar, calcular
La iniciativa está abierta para toda la gente, no solo para empresas e instituciones. Únicamente tienes que registrarte y podrás acceder a sus contenidos. De esta forma, la acción se divide en tres etapas primordiales:
- Calcular. Para saber en cuánto debes reducir las emisiones, primero debes calcularlas.
- Compensar. Cancelando los créditos puedes equilibrar el impacto negativo al medioambiente.
- Reducir. El resultado es una disminución de las emisiones de CO2 a la atmósfera.
Si analizamos las propias cifras de la organización, podemos ver un balance muy exitoso. Los 2 millones de CTE cancelados equivalen a más de 2 millones de toneladas de CO2 que no se han emitido. La propia organización afirma que es una de sus iniciativas más prometedoras de cara al futuro.
Por su parte, la plataforma se integra dentro de Neutralidad Climática Ahora. Cuando se publicó, la intención era lograr medidas reales y certeras antes del año 2020. La pandemia ha obstaculizado los planes, pero eso ha hecho que sea más urgente que nunca actuar. Lo más importante para la agencia es la cooperación, ya que, como afirman, «ningún país puede triunfar por sí solo».
Proyectos para compensar la huella de carbono
¿Para qué sirven las aportaciones económicas? La propia institución las utiliza para financiar proyectos distribuidos entre distintas zonas en vías de desarrollo. Estas son Oceanía, Asia, África, América Latina y el Caribe (estas dos últimas en conjunto).
Estas son algunas de las operaciones a las que puedes destinar tus aportaciones:
- Construcción de una central hidroeléctrica en la isla Viti Levu, en Fiji.
- Programa de cocinas eficientes en las zonas rurales de Kenia.
- Programa de salud pública en el agua para África Oriental.
- Levantamiento de una planta fotovoltaica en un pueblo de la India.
- Desgasificación de un macro vertedero en Dubai.
Si las analizamos en conjunto, podemos comprobar cómo se dividen en tres grandes áreas. Estas se corresponden con la economía, la sociedad y el medioambiente, y se centran en los ODS. La mayoría buscan la creación de empleo, el bienestar social y la optimización de los recursos disponibles.
Si prefieres contribuir con proyectos que tienen impacto cerca de ti, no dudes en echar un vistazo a nuestra página de proyectos, que además de fomentar la biodiversidad en las zonas en las que actúan, están a pocos kilómetros de ti, por lo que ¡incluso puedes visitarlos!
Objetivos climáticos para 2030
Las Naciones Unidas actualizan constantemente su lista de objetivos para compartirlos con la sociedad. La clave está en lograrlos para el año 2030, y evitar un aumento en las temperaturas superior a 1,5 ºC. Todos los años, las 195 naciones se reúnen en las Cumbres del Clima para anunciar sus compromisos. Sin embargo, tu papel también es relevante.
Estos son algunos de los propósitos que la ONU se ha marcado:
- Aumentar la resiliencia ante desastres naturales en todas las regiones del planeta.
- Reunir 100.000 millones de dólares para la transición ecológica de países en desarrollo.
- Lograr la plena descarbonización de las empresas, sobre todo las del sector energético.
Por otro lado, la organización se ha propuesto reducir la huella de carbono al máximo. Para lograrlo, esta debería quedar disminuida a la mitad para 2030 y eliminada por completo en 2050. Se trata de una meta ambiciosa, pero también de la única oportunidad para evitar lo que la agencia denomina como una «catástrofe climática».
Qué son créditos o bonos de carbón
Más que una iniciativa, es una realidad concreta que busca reducir la huella de carbono en ciudadanos, empresas e instituciones. Se implantaron en el año 1997 como parte del Protocolo de Kyoto, que fue sucedido por el Acuerdo de París en 2015. En la cultura popular, son la base de lo que se conoce como «comprar cielo» a otros países.
El mecanismo es sencillo: una nación consigue reducir sus emisiones de carbono significativamente. Cuando ha cumplido el objetivo, puede lanzar bonos de carbono y obtener dinero por ellos, que usará para fines medioambientales. Otra nación puede comprar un bono y hacer como si hubiera reducido las emisiones en su propio territorio. Los créditos y bonos de carbono son un tema complejo pero muy importante de entender, y los abordaremos en otro artículo.
En definitiva, descarbonizar la economía es un objetivo compartido que pretende evitar un futuro incierto. La clave está en la colaboración entre toda la humanidad, tal y como defienden las Naciones Unidas. Si quieres formar parte del cambio, recuerda: calcula tu huella, redúcela y compénsala. ¡Juntos, podremos!
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